Esta pieza de cobre plateado es obra de finales del siglo XVIII, y pertenece a la imagen de Nuestra Señora de la Salud de la parroquia hispalense de San Isidoro.
Obra del taller de Manuel Seco Velasco en 1963, está realizada en plata dorada, con cuatro cabezas de ángeles realizadas en marfil. Esta corona ha sufrido una transformación a mediados de los años setenta, ya que al principio la cruz estaba en el centro de la ráfaga y ahora la remata. El canasto lleva cartelas ovales, figurando en el frontal las cinco cruces de Jerusalén y sobre ellas un cáliz y la Sagrada Forma, como símbolo de la Hermandad.
En el centro de la ráfaga hay una cartela circular con una jarra de azucenas, símbolo de la pureza virginal de María Santísima. Además hay aderezos de pedrería.
Pieza anónima repujada en plata de ley en el siglo XVIII. De factura muy original, en especial los rayos flamígeros terminados en estrellas, de las cuales son añadidas posteriormente las exteriores.